CHIL.ME

Dec 04, 2017 at 08:26

El avance tecnológico hace temblar el tablero de cualquier trabajador ante el advenimiento de una suerte de “automatización” de funciones por medio de la inteligencia artificial. Después de que las computadoras generaran el mismo tempor en los ’80, una fuerza virtual arremete sobre los que se habían acomodado en el mundo laboral.

 

Mi abuela solía decirme en mi adolescencia: “Abogados, contadores y médicos serán necesarios siempre en este mundo, mientras que las demás profesiones pueden ser reemplazadas por máquinas”. Claro que mi ingenua abuelita lo decía desde su experiencia, cuando pudo ver cómo un centenar de hombres y mujeres que habían dejado su cuerpo y energía en una fábrica debían dejar sus puestos de oficina o técnicos con el advenimiento de la era de las computadoras.

 

Entonces era importante saber computación y todos los que pudimos hacerlo nos pusimos frente a los monitores negros con letras verdes o naranjas a dar los primeros pasos. Pero, el avance tecnológico no dejó de estirar los brazos lo más que pudo reemplazando la energía humana por la de las máquinas, con el fin de simplificar y automatizar.

 

Así las cosas, en la actualidad las tareas más complejas pueden ser abordadas por una computadora, o una máquina inteligente, desde la construcción de tejido humano, la realización de planos arquitectónicos, hasta la creación de contenido para un medio periodístico. Alguien debe hacerse cargo de la creación de estos avances, no son las máquinas atribuyéndose cada vez más poderes, sino que una o más personas propician este avance.

 

Según un estudio de la Universidad de Oxford sobre el futuro laboral de las profesiones más populares, son los desarrolladores de softwares los que corren menos riesgos de perder sus trabajos (con un 4,2% de riesgo) frente a los altos porcentajes de riesgos que tienen profesiones como los contadores o auditores (93,5%) y los fiscalizadores de impuestos (98,7%).

 

Nubes de datos

Como es sabido, tampoco ahora se llevan libracos con datos sensibles de una empresa, como el estado contable o el balance de una pre venta. Gran parte de esos datos que antes se manejaban manual y físicamente, hoy conviven en una nube cifrados y codificados para resguardarlos de las inseguridades y con capacidades como para ser operados virtualmente por las personas autorizadas.

 

Por tanto, un evaluador de impuestos o un contador de esta nueva era no sólo necesita saber lo propio a su profesión, sino también cómo maniobrar con las herramientas tecnológicas que permiten que una empresa tenga oficina en la tierra y archivo en la gran nube.

 

Se supone que a finales del año 2016 nos vamos a encontrar con un número tal de datos, equivalente al 40% de los datos generados por la humanidad hasta el año 2015. El caso es cómo hacer que esa acumulación de información sea trascendental para la toma de decisiones de una empresa o de una política de estado.

 

La era de los taxologist

De nada sirve un analista de impuestos que no puede preveer accidentes comerciales de la nueva era, desde una regulación hasta una estrategia dinámica de impuestos. Los taxologist son esa figura que el presente necesitaba, personas con conocimientos teóricos impositivos y sobresalientes en el uso de la tecnología al mismo tiempo.

 

Estos profesionales pueden resolver problemas, e incluso, adaptarlos a desarrollos tecnológiocs que mejoren la efectividad del trabajo. Ya no ocupan una oficina dentro de una empresa sino que suelen ser asesores freelance, aunque también pueden ser grupos de taxologist que permiten brindar asistencia las 24 horas del día en línea desde cualquier parte del mundo.

 

Las respuestas ágiles y eficientes son necesarias para los empresarios que mezclan una especie de ansiedad tecnológica con pánico a la tercerización en la gestión de datos complejos. Sin embargo, antes del balance en libro con el contador aburrido y sin propuestas de la vieja era, prefieren el riesgo.

 

Aquellos profesionales del área que quieran adelantarse a las nuevas sugerencias, lean atentamente el listado que Horizons 2015 propició con motivo de demostrar hacia dónde esta virando la transformación: 

  • Los contadores ya no son sólo eso, sino que ofrecen otros servicios actualizados. 
  • Los contadores deben adquirir nuevas experiencias y conocimientos respecto a tendencias internacionales, desarrollo de servicios compartidos y trabajo a distancia. 
  • Deben tener un manejo fluido e innovador de la tecnología. 
  • Deben utilizar las redes sociales con comodidad para conectar con colaboradores y clientes.

 

En un escenario en donde la reglamentación y el sistema tributario está en constante modificación, se les está pidiendo a los contadores y analistas, una nueva capacidad que hasta ahora les era ajena a su profesión. Pero no son los únicos, los médicos y abogados (aquellos que también señaló mi abuelita) están siendo reemplazados por las tuercas inteligentes. Ya hablaremos de ello.

 

Fuente: DonWeb.com